En ocasiones podemos errar al elegir qué ponernos o cómo ir vestido a un funeral, ocurriendo en multitud de ellas que, en lo que a la ropa se refiere, acabemos equivocándonos tanto por exceso como por defecto.
En nuestra empresa, Funeraria Florido, vivimos a diario este complicado momento para familiares y amigos del fallecido y podemos ayudar con una serie de recomendaciones básicas para nunca desentonar en una ocasión así.
Veamos entonces cómo conseguir un equilibrio que nos ayude a acertar con nuestra elección.
Todo lo que debemos saber para acertar en cómo ir vestido a un funeral.
Lo primero que debemos diferenciar es si nuestra presencia responde a una cercanía intensa y directa con el fallecido o si por contra asistimos para acompañar a familiares y amigos como muestra de afecto.
Cuando somos familia directa es comprensible que optemos por el color negro como base de nuestro atuendo, pudiendo ser el único color o por lo menos el imperante. Además es recomendable en el caso de los caballeros, vestir lo más formal posible y en el caso de las señoras con elegancia y sobriedad.
En estos casos sobran decididamente los brillos, la ropa con transparencias, los diseños muy ajustados, faldas cortas, escotes pronunciados, etc que denotan incluso falta de respeto y recogimiento en un momento de tristeza y dolor.
Las joyas y los complementos también están prácticamente de sobra. Pendientes vistosos, brillantes, joyas llamativas, recargadas, tocados, adornos en el pelo… todo ello debe ser suplido por pequeños detalles o incluso por la ausencia total de los mismos.
Cuando no somos familia directa pero podamos estar más o menos vinculados a alguien de la misma, igualmente debemos respetar algunas normas básicas.
Tal vez en estos casos sea recomendable todo lo contrario en cuanto a la sobriedad del luto integral, pues podemos resultar exagerados en nuestra demostración de duelo. Colores oscuros, sobrios, sin estridencias es lo más apropiado. Hablamos de olvidarnos de tonos eléctricos, rojos intensos, motivos florares de muchos colores: con un tono gris, azul oscuro, verde apagado, etc estaremos a la altura de las circunstancias.
Tampoco es apropiado vestir con grandes tacones, camisetas de tirantes, bermudas, camisetas sport, etc. Una camisa lisa y discreta, jersey de tonos apagados, abrigo básico en invierno, etc será oportuno.
El color blanco puede servir de combinación para mitigar la oscuridad de otros tonos como el negro pero nunca se debe ir vestido a un funeral íntegramente de blanco como si de una boda ibicenca se tratase.
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